Nunca había pasado tanto tiempo en la cocina como ahora. Por alguna razón arquitectónica, la cocina es el mejor lugar para escuchar cuando el viento sopla fuerte y choca con el edificio. Me gusta recordar cuando me pegaba en la cara.
I have never spent as much time in the kitchen as I do now. For some architectural reason, the kitchen is the best place to hear when the wind blows and hits the building. I like to remember the time when it hit me in the face.